1.Derretir la mantequilla. Mientras, entibiar el agua.
En un mesón poner la harina formando un volcán o corona. En el medio agregar la mantequilla y el huevo. Mezclar bien con ayuda de un tenedor comenzando desde los bordes y agregando el agua tibia progresivamente según se requiera. Seguir amasando a mano para formar una masa suave y elástica, por 5 a 8 minutos. Dejar reposar en un bowl ligeramente enharinado por media hora.
Cortar el queso en bastones de 2 x 2 centímetros y 6 centímetros de largo, reservar en el refrigerador.
Dividir la masa en 2 y estirar la masa en un mesón ligeramente enharinado hasta que tenga un grosor de 1 ½ a 2 milímetros. Ir rotando la masa espolvoreando el área de trabajo.
Cortar en tiras uniformes de 2 a 3 centímetros para forrar los bastones de queso , enrollándolos en la masa.
Precalentar el aceite a fuego medio alto. Bajar la temperatura a medio, freír los tequeños volteándolos regularmente, por 2 a 4 minutos hasta que se doren de manera uniforme. Si el queso comienza a ser visible hay que retirarlos del aceite. Poner sobre un recipiente con papel absorbente, enfriar por unos 2 minutos y servir.